En una casa semienterrada, o enterrada, la temperatura interior está muy cerca del confort térmico: cálido en invierno y fresco en verano, la temperatura será más o menos constante y podría oscilar entre los 18-23ºC. La inercia térmica amortigua y retarda las variaciones de temperatura, entre el día y la noche e incluso entre estaciones, haciendo que tanto los veranos como los inviernos sean más amables en su interior, pues en verano va absorbiendo el calor y éste va liberándose durante los meses más fríos, pudiendo ahorrar en calefacción y aire acondicionado, suponiendo un importante ahorro energético.
Casa Reciclada. Fotógrafo: Andrés Flajszer 
Casa en Voladizo. Fotógrafo: David Frutos
El hecho de estar semienterradas hace que se integre con el paisaje, de manera que el impacto visual se minimice, buscando una armonía con el entorno, por lo que es otra ventaja a tener en cuenta. Además, quedan protegidos ante fenómenos atmosféricos.
Casa Semienterrada. Fotógrafo: Andrés Flajszer 
Casa Semienterrada. Fotógrafo: Andrés Flajszer
Conocer el funcionamiento de las viviendas enterradas e integrarlo en el diseño de viviendas sostenibles, según las necesidades, es un trabajo que desarrollamos desde eneseis Arquitectura. Puedes ver algunas de nuestros viviendas semienterradas aquí:
